Los agujeros negros son restos fríos de antiguas estrellas, tan densas que ninguna partícula material podrían escapar de su poderosa fuerza gravitatoria, por lo que cada planeta o estrella que se les acerca, desaparece en cuestión de segundos.
¿Que pasaría si un agujero negro se acercase a nuestro Sistema Solar? Los agujeros negros representan la última fase en la evolución de enormes estrellas, que fueron hace mucho tiempo, 10 o 15 veces más grandes que nuestro actual Sol. Cuando estas estrellas enormes explotan en su última fase de vida, se convierten en supernovas, pero algunas estrellas en las que no se produce ninguna fusión, no se convierten en supernovas. Estas estrellas se repliegan sobre sí mismas, ya que no hay ninguna fuerza que se resista a la gravedad, dando lugar a un agujero negro, que encoje hasta un volumen cero, en cuyo punto pasa a ser infinitamente denso. La luz de esa estrella es atrapada en la órbita del punto denso, de ahí que se llame agujero negro. Tienen un tamaño pequeño con un radio de unos tres millones de kilómetros, por lo que son difíciles de observar de manera directa. Los científicos para encontrarlos, intentan buscar zonas con una gran masa oscura.
La primera fotografía de la Historia de un agujero negro
Los agujeros negros son uno de los más estudiados por los científicos y astrónomos. Con el tiempo, se ha ido descubriendo alguno de ellos. El más cercano a la Tierra es Cygnus X-1, y se encuentra a una distancia de unos 8000 años luz. No son totalmente negros, sino que brillan de una forma muy débil al emitir radiación. Esto fue descubierto por Stephen Hawking, de ahí que se le denomine Radiación de Hawking. En cuanto al número de agujeros negros, es posible que hayan más agujeros negros que estrellas visibles. Todo parece interesante e impresionante hasta ahora, pero el problema se da cuando un agujero negro se acerca a un planeta o estrella.
Una estrella devorada por un agujero negro
Esto sería diferente en el caso de un planeta. Los científicos afirman que no nos deberíamos preocupar de nada, ya que al pasar esto, no nos daríamos cuenta. Eso no significa que no podríamos identificar el agujero negro mediante los equipos tecnológicos. En primer lugar, mientras se va acercando a nuestro planeta, las órbitas de los planetas comenzarían a distorsionarse, y las estaciones del año de nuestro planeta empezarían a cambiar de forma abrupta. La Luna podría moverse de su órbita, y provocar cambios en las mareas e manera catastrófica. Nuestro planeta podría ser lanzado hacia el Sol, en el peor de los casos, o hacia el espacio exterior, por lo que se congelaría de manera rápida, matando a todo ser vivo de la Tierra. Si ninguna de esas cosas ocurre, el planeta sería engullido por el agujero negro de forma lenta o rápida, dependiendo del tamaño del agujero negro. Quizás en el momento no nos daríamos cuenta, pero traspasado un tiempo, la parte más cercana al agujero negro sentiría una fuerza gravitatoria mucho más potente, que despedazaría al planeta. Otra consecuencia, sería llegar a quemarnos, debido a la radiación que emitiría el agujero negro. También hay otra teoría, en la que los científicos deducen que tras ser engullidos por un agujero negro, podríamos seguir viviendo, pero como un holograma. Esto respaldaría la teoría que presentó hace un año el físico, Samir Marthur, que sostiene que todo lo que contacta con un agujero negro no se destruye, sino que se convierte en una copia imperfecta de sí mismo. Según esta teoría, los agujeros negros se interpretan como una especie de máquinas de copia imperfecta.
¿Qué piensas sobre este tema? ¿Cuáles de las afirmaciones anteriores crees que pasaría si nos tragase un agujero negro? Dímelo en los comentarios.